Muchas de las decisiones que se toman en las empresas, los que las toman saben de antemano que no es la mejor decisión. Sin embargo las toman para cubrirse las espaldas. A veces lo que razonablemente se ve como mejor comporta un riesgo y si sale mal la culpa se le echa al que tomó la decisión. Ante esta posibilidad mejor tomar una segunda opción, que aunque es menos ventajosa, uno queda cubierto de la responsabilidad ante el fracaso. Son las llamadas decisiones defensivas.
Yo ya sé lo que hay que hacer, pero para cubrirme las espaldas contrato a una consultora que avale que es precisamente esto lo que hay que hacer. Así si la cosa sale mal, yo estoy libre de responsabilidad. Si no hubiera contratado a la consultora, sería yo el responsable. Total, que se hace lo que ya teníamos pensado de antemano, pero habiendo pagado una buena suma en servicios de consultoría.
En US, país dado a los litigios, es costumbre que los médicos encarguen más pruebas y análisis de los necesarios, también para cubrirse las espaldas ante ulteriores litigios. La consecuencia es que la sanidad norteamericana está quebrada.
Un buen jefe debe saber esto y evitar que en su equipo se tomen este tipo de decisiones defensivas. Para ello ser conscientes de que hasta la mejor alternativa puede fracasar sin que sea responsable del fracaso el que tomó la decisión. Y debe crear un clima en su empresa en el que se valore el cómo se toma la decisión y no si la suerte a estado a favor o en contra.
Muchos ejemplos hay de decisiones defensivas que seguro compartiréis en vuestros comentarios. Hasta el jueves que viene. Yo ya estoy de vacaciones.
Cuánta razón tienes Miguel Ángel. En honor a la verdad hay que decir que las consultoras añaden más valor a lo que «todos saben lo que hay que hacer». Añaden nuevas perspectivas y bajan al detalle de la amplia casuística muchas veces simplificada en las fases iniciales. Así, entre todos, se genera más «Valor Seguro» (o con una alfa menor si hablásemos en argot financiero/inversiones).
Dicho esto, que pena que se tenga que haya organizaciones en las que lo más conveniente sea aplicar decisiones defensivas. Puede identificar que la cultura corporativa está mal orientada o que el directivo que lo haga tiene más de «defensivo» que de «ejecutivo».
Pongo en la mesa del CEO, y en la mesa del Consejo, la patata caliente de arreglar esa situación generalizada (que he llamado cultural). En mi opinión, y más en los tiempos que nos ha tocado vivir, todos los días hay que dirigir. Consolidar una posición, solidificar una estrategia, defender un mercado, eliminar un producto, vender una división, comprar un mercado, invertir en una nueva idea de negocio… En todas las posibilidades que se nos pueda ocurrir hay que actuar después de haber pensado mucho. Mis abuelos decían: «Toma la decisión mañana, cuando te despiertes». Es lógico contratar a quién sea para pulir, analizar, investigar todas las alternativas, pero no entiendo el concepto de dilatar una decisión. Muchas veces contratar a una consultoria no es más que jugar con el tiempo (según convenga) y, posiblemente, buscar que alguien «exerno» justifique lo contrario (por que yo, directivo, no me atrevo).
En el caso de que sea un tema específico, y reiterado, de una persona o la de un pequeño grupo de personas, el tema sería más tributario del departamento de RRHH. Posiblemente un «talento» no debidamente colocado o una temporalidad emocional de la persona (una fobia o una filia individual).
Joan Carles, efectivamente las consultoras y los consultores realizan un trabajo muy útil. Y lejos de mi intención el minusvalorarlo. lo que pasa es que también hay situaciones en que son contratados por los directivos para cubrirse las espaldas ante una decisión a tomar.
Gracias por todo tu comentario que es muy interesante
Saludos,
Miguel Angel
Como te decía no creo que haya muchos comentarios debido al verano, por allá. Pero aprovecho para comentar que ya empezaron los requerimientos de tests para pilotos a raíz de lo que pasó hace poco. Es otra prueba de cómo aparecen gastos que se dan en su momento pero que ahora descubren que no se dieron como debe ser. Mejor sería dar de baja a los ex-responsables (porque hay que despedirlos por hacer un mal trabajo) y que así mejoren su tarea profesional y dar oportunidad a otros que han demostrado ser mejores en este campo de enrolamiento. Siempre insistiré en que eso pasa por tomar al recomendado que nunca será el adecuado porque como decía Juan Antonio, no se puede evaluar a alguien experto si no eres mejor que él en la especialidad (por lo menos mejor que el pariente o recomendado).
Gracias Javier, en todos los trabajos y posiciones hay profesionales responsables y tmbién hay los que son menos.
Saludos desde Europa,
Miguel Angel
Mal mal….
Sabes que no estas tomando una buena decisión.
No eres capaz de identificar la solución adecuada….. ¿O si lo eres?
Y como no te atreves a tomar una decisión… pues decides que te vas a gastar dinero (¿tirarlo?) en contratar a una firma de consultoría para que te diga lo que ya sabes
¿De qué tienes miedo?
Al final la responsabilidad va a ser tuya… así que mejor ponte a trabajar y haz lo que tienes que hacer.. te pagan para eso.
Está en tu mano
Y recuerda que si tienes una duda, los consultores te la ampliamos. La decisión es solo tuya
Hola Professore! Cuánta razón tienes! Conozco más de un caso pero por prudencia, que es algo que me habéis enseñado muy bien en el IESE, voy a obviar nombres y apellidos de ilustres personajes. Ellos ya saben quien son!
Un abrazo,
Moritz
Pues nada Moritz, se te ve prudente. Eso es bueno.
Gracias y saludos,
Miguel Angel