Icono del sitio Toma de Decisiones Miguel A. Ariño

¿Tienes claros cuáles son tus principios?

From Wikimedia Commons

Muchas veces a la hora de decidir nos encontramos nos encontramos con dos alternativas y no sabemos que hacer. Una es buena en un aspecto A, pero mala en un aspecto B, y a la otra le pasa al revés. Total, que estamos hechos un lío. Hay un modo de abordar este tipo de decisiones. Es preguntarnos ¿cuál de estas dos alternativas se alinea mejor con mis principios y valores?

Tus principios y tus valores indican qué tipo de persona quieres ser. Estos principios indican cuáles son tus prioridades en a vida. Cuando una decisión se nos presenta peliaguda, si no sabemos qué hacer, suele ser una señal de que tenemos un conflicto en nuestras prioridades.

Ya hemos analizado suficientemente las consecuencias de cada alternativa, y estamos indecisos. No hay que seguir analizando. Es el momento de pensar qué alternativa está más acorde con quien queremos ser. Abordar la decisión de esta manera además de facilitarnos la elección nos obliga a pensar sobre nuestros valores. Hacerlos más explícitos y más presentes en nuestro actuar.

También un modo de objetivar más la decisión, teniendo en cuenta nuestros valores es pensar si esta situación se le presentara a un buen amigo y me pidiera un consejo ¿qué le aconsejaría? De este modo objetivamos más la decisión porque nos alejamos un poco de nuestra problemática y perder protagonismo personal.

Hemos de tener en cuenta que el modo cómo actuamos nos define como personas. Por lo tanto, a la hora de decidir han de estar muy presentes nuestros principios, para evitar la esquizofrenia de pensar de una manera y actuar de otra. La reflexión de este mensaje nos puede ayudar a decidir cuando estemos hechos un lío. Hasta el jueves que viene.


Salir de la versión móvil