Icono del sitio Toma de Decisiones Miguel A. Ariño

No confundir hechos con opiniones

errores

En un mensaje de hace un año decíamos que uno de los principales errores que cometemos cuando tomamos decisiones es la falta de conocimiento de la realidad. Aunque la realidad es objetiva, la percibimos de forma subjetiva y la vemos más como nos gustaría que fuera que como realmente es.

Relacionado con ese error está el que muchas veces confundimos los hechos con las opiniones, los datos con las suposiciones. Que las ventas de una compañía han bajado un 20% es un dato. Que el responsable de esa bajada es tal persona eso ya es una opinión. Cuando tomamos decisiones utilizamos tanto datos objetivos como opiniones subjetivas, y es importante saber distinguirlos. Los datos son incontestables y las suposiciones pueden estar equivocadas.

Si a una suposición le damos categoría de hecho, no la cuestionaremos, y si resula que es una opinión equivocada, las decisiones que tomemos basandonos en esa opinión serán decisiones erroneas. Pero si a las opiniones les damos la categoría de opiniones o suposiciones estaremos abiertos a la posibilidad de que sean erroneas y rectificaremos si comprobamos que realmente lo son.

Si tomamos decisiones basadas en juicios equivocados facilmente cometeremos injusticias, y las injusticias son las cosas que más destruyen el buen ambiente en las empresas y en las organizaciones. Además fruto de esse error las decisiones que tomemos estarán equivocadas y a medio plazo lo notaremos. Directivo: distingue los hechos de las opiniones, por mucho que los hechos no sean como a tí te gustaría que fueran. No te autoengañes.

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