No hay ninguna persona que viva aislada de los demás. Todos nos relacionamos con otros. Y en estas relaciones con otras personas a veces surgen conflictos. Ante estos conflictos hay dos tipos de personas, las que echan leña al fuego y agrandan el conflicto y las que intentan pacificar las cosas.
Magnificando los conflictos no se resuelve nada, sino que se genera malestar y animadversión. Intentar solucionarlos es una actitud más positiva.
Qué tipo de persona uno es, pacificador o conflictivo, suele depender, entre otras cosas, de si uno es soberbio o humilde. El soberbio ve en todo agravios personales y tiende a hacer más grandes los conflictos. El pacificador suele ser una persona magnánima que sabe pasar por alto las diferencias que hay entre unos y otros
El ser pacificador no significa que uno tenga que aguantarse ante las injusticias. Todo lo contrario, un pacificador consigue que las relaciones entre unos y otros sean de justicia. Es precisamente el conflictivo el que se encuentra a gusto en las situaciones de injusticia. Ahí es donde encuentra justificación para sembrar discordia. El pacificador, ante la injusticia hace lo posible para revertir la situación.
Hay personas que caen bien a todo el mundo y personas que caen mal ¿por qué será? ¿Tú qué tipo de persona eres? Hasta el jueves que viene.
Saludos prof. Miguel-A y grupo. Encuentro muy interesantes estas reflexiones sobre comunicación y convivencia. Mi aportación al tema la recuperaré de una de aquellas máximas de la escuela, que tantas veces nos repetían para que no las olvidasemos (a veces sin comprenderlas bien), pero que con los años dan algún fruto. Recuerdo decía así: “Tengamos siempre presente que cada persona es: Única, Irrepetible e Insustituible”. A mí personalmente, me ha ayudado muchas veces considerarla, pues 1ro) Me sitúa en esta breve existencia temporal: # Única -> jamás habrá nadie con nuestros mismos valores e inquietudes, # Irrepetible -> jamás habrá nadie en el mismo entorno y circunstancias, # Insustituible -> jamás nadie podrá suplantar nuestra intervención en el mundo, 2do) Me predispone a: Puedo, Quiero y Debo ayudar en esta situación, y 3ro) Me conciencia que los demás tendrán sus propias apreciaciones y justificaciones (todos somos inmensamente parecidos). Saludos a todos los demás pacificadores, Xavier D.
Muchas gracias Xavier por tus consideraciones.
Saludos,
Miguel Angel
Gracias por estas reflexiones, pienso que hay etapas y momentos en nuestra vida que pasamos por momentos de autoproclamación y acentuamos la parte conflictiva, pero razonando y con la experiencia reconocemos y nos esforzamos por se “pacificadores”; si nuestros directivos institucionales, empresariales, políticos… se esforzaran un poco cuanto avanzaríamos.
Gracias Pere por participar. Todo cambiaría si en los lugares de trabajo, en la familias y en todas partes donde se reúne gente hiciera todo el mundo un esfuerzo por pacificar.
Saludos,
Miguel Angel